No se dan cuenta de que están en contacto con sus creaciones todo el tiempo y de que estas afectan tanto la manera en la que las personas perciben un mensaje como las decisiones que estas toman al respecto.
Normalmente las personas piensan que cualquiera puede hacer diseño de información, en especial diseño de publicidad. Que agregar unos toques de color y una linda chica en el producto resolverá todos los problemas pero el diseño va mucho más allá de solo llamar la atención.
Cada una de las creaciones tiene un gran peso simbólico que están pensadas y dedicadas a proyectar un mensaje en específico y toma años y mucha experiencia el poder producir diseños que realmente valgan la pena.
La riqueza cultural de los diseñadores es un aspecto que realmente afecta la calidad y la dimensión de sus creaciones. Es realmente importante estar informado sobre diferentes culturas, tradiciones, creencias, etc. de otros lugares para tener una visión mucho más amplia de lo que se puede hacer para comunicar un mensaje.
Tal vez las personas no le den al diseño la importancia que se merece pero nosotros como diseñadores no podemos dejar que esto defina el empeño y la calidad de estos. Para la sociedad es algo cotidiano estar en contacto con tanta información que realmente no se dan cuenta de como su presentación afecta su vida, y aunque sea un trabajo silencioso y que pensamos que nadie aprecia, es nuestro trabajo hacer que la sociedad tenga acceso a la información sin que se tenga que hacer un gran esfuerzo para comprenderla y sin que haya problemas en cuanto a la calidad del mensaje.